Dentro de las diferentes fechas conmemorativas existentes en el calendario salvadoreño, el 2 de noviembre, Día de los Difuntos en El Salvador, es uno de los más importantes, porque permite recordar y honrar a aquellos seres queridos que ya han fallecido.
Esta conmemoración, conocida también como el Día de los Fieles Difuntos, permite a los salvadoreños acercarse a los cementerios para visitar a sus familiares y allegados. Por su importante carácter es un día de asueto nacional en el país.
Historia del Día de los Difuntos en El Salvador
El Día de los Difuntos forma parte de los diferentes memoriales del calendario católico. Según la Sociedad Española de Radiodifusión, esta festividad se extendió en el año 998 gracias a Odilón de Cluny, conocido también como San Odilón, quien popularizó esta conmemoración hasta que fue aceptada alrededor del siglo XVI.
Así, cada 2 de noviembre, de manera internacional, se recuerda a los difuntos. Por otro lado, su llegada a El Salvador probablemente se dio con los españoles, en la época en la que conquistaron tierras salvadoreñas.
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¿Cómo se celebra el Día de los Difuntos en El Salvador?
Al ser una importante fecha para los salvadoreños, además de ser un asueto nacional por décadas, el Día de los Difuntos trae consigo diferentes costumbres realizadas por los salvadoreños para conmemorar el día. Entre ellas están:
Enflorar
Una de las costumbres más reconocidas, sobre todo, por aquellos quienes suelen acercarse a los cementerios. Se acostumbra a enflorar, con flores de todo tipo y tamaño, las lápidas de los fallecidos.
Diferentes camposantos en el país se llenan de colores por el gran número de adornos florales que son colocados en este día.
Limpieza de las tumbas
Otras de las costumbres es dedicar las mañanas a limpiar o también volver a pintar las tumbas de los seres queridos que ya fallecieron. Los diferentes camposantos en el país ven gran afluencia de salvadoreños que asean completamente las lápidas.
Además, muchos optan también por pagar los servicios a otras personas encargadas de la limpieza, quienes suelen trabajar cada 2 de noviembre específicamente en el pintado y cuidado de las tumbas.
Serenatas
Algunos salvadoreños, en pro de conmemorar positivamente a sus fallecidos, también llevan serenatas, con la música favorita de la persona a quien están recordando, volviendo el ambiente de los cementerios más colorido y festivo.
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Comida tradicional del Día de los Difuntos en El Salvador
Este día también trae consigo comida tradicional degustada casi exclusivamente en esta fecha. Si bien, los salvadoreños suelen acompañar esta conmemoración con pupusas, tamales o atoles, dos platillos resaltan entre todos estos: Las hojuelas y el ayote en miel.
Las hojuelas
Las hojuelas son una merienda tradicional que acompaña esta conmemoración. En los días cercanos, es habitual que los salvadoreños degusten este platillo típico, que forma parte de la gastronomía de El Salvador.
Tila Ortíz, salvadoreña quien se ha dedicado por casi 50 años a la preparación de este platillo, indica que, días previos al 2 de noviembre, inicia su negocio para vendérselas a los sonsonatecos que se acercan al cementerio general de Sonsonate.
“Los cementerios son visitados por salvadoreños que viven en otros países y cuando ven las hojuelas la compran para recordar sus años de niñez. Aquellos años cuando las probaron junto con sus padres. Algunos de ellos me piden que se las prepare para llevar”, comenta Niña Tila, como se le conoce cariñosamente.
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El ayote en miel
Por otro lado, el ayote en miel es otro platillo muy característico de esta celebración. Inclusive, un día antes del Día de los Difuntos, el 1ero de noviembre, en Tonacatepeque, se celebra la Calabiuza, el “Halloween” 100% salvadoreño, donde este platillo es protagonista.
“Desde hace muchos años nuestros abuelos nos contaron que salían niños y niñas a pedir ayote en miel un día antes del Día de Difuntos. Salían de las pequeñas casitas de bahareque donde no había energía eléctrica, era un caserío muy pequeño, abundaba la producción de ayote y la jícama y la gente era muy unida”, comenta René Estrada, habitante de Tonacatepeque.
Conozca más sobre la Calabiuza.
Asueto Nacional de El Salvador
El Día de los Difuntos cuenta con gran importancia en el país. Es por ello por lo que, a través del Decreto Legislativo N° 17, con fecha del 4 de marzo de 1940, se emitió la Ley de Asuetos, Vacaciones y Licencias de los Empleados Públicos. En esta se agregó como asueto nacional este día.
De esta manera, los salvadoreños tienen la posibilidad de acercarse a los diferentes camposantos en el país y mantener reuniones en familia y/o amigos para conmemorar a sus fallecidos.