Los Cóbanos es una de las playas salvadoreñas que intrigan al turista por sus rincones para bucear. Además, cada noviembre recibe a las ballenas que escapan del invierno de Norteamérica. También asombra porque es patrimonio subacuático del mundo y cementerio de barcos.
Ubicada en Acajutla, departamento de Sonsonate, Los Cóbanos atrae el turismo por sus atractivos típicos de los 300 kilómetros de costa salvadoreña. Además tiene características culturales y ambientales que la hacen especial a escala mundial.
El 2 de febrero del 2019, Los Cóbanos fue declarado como Sitio Ramsar en El Salvador, o Humedal de Importancia Internacional, lo cual la convierte en un sitio de importancia para la sustentabilidad del planeta.
Los Cóbanos cuenta con Valor Ecológico Mundial
Ramsar proviene del nombre de la ciudad iraní en la que, en 1971, un total de 18 naciones firmaron la “Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional, especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas”.
El sitio web de RAMSAR especifica que este es un tratado intergubernamental que brinda un marco de acción para conservar y también hacer un uso racional de los humedales y sus recursos.
En El Salvador, esta convención entró en vigencia el 22 de mayo de 1999. Y actualmente ya son ocho los sitios que poseen esta designación. La bahía de Jiquilisco, el estero de Jaltepeque, las lagunas de Olomega y El Jocotal, el lago de Güija, el humedal de Cerrón Grande y también la barra de Santiago complementan este listado.
Además, conoce la historia de Acajutla, la Ciudad Portuaria.
Refugio de vida marina
Además de su valor como humedal, Los Cóbanos ha sido designada como área natural protegida, señala la web oficial de RAMSAR. Asimismo, sus aguas en el Pacífico son el hogar de la única formación de arrecife entre México y Costa Rica. Y no solo eso: es el único lugar en El Salvador donde ocurren corales formadores de arrecife.
Por otro lado, este delicado ecosistema es el refugio de especies como el pepino de mar, la tortuga laúd y el caballito de mar del Pacífico.
Y por sus condiciones particulares, proporciona el área de anidación para la tortuga carey, una de las especies de tortugas marinas en grave peligro de extinción.
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Los Cóbanos: Cementerio de Barcos
Para aquellos más intrépidos, Los Cóbanos también ofrece la oportunidad de dar rienda suelta el espíritu aventurero. La práctica del buceo en la zona permite no solo disfrutar de la diversidad y riqueza natural submarina, sino también la posibilidad de observar embarcaciones que naufragaron hace más de 100 años, según datos del MITUR.
Además, en El Salvador se cuenta con el registro de más de 10 sitios arqueológicos marítimos, entre los que destacan varios pecios (término utilizado para referirse a hundimientos de barcos). Los Cóbanos cuenta con varios de ellos, de acuerdo con información de la web del Ministerio de Cultura.
Parte del patrimonio subacuático salvadoreño reposa en Punta Remedios, en el área natural protegida de Los Cóbanos. También, en su lecho marino están los restos de varias embarcaciones.
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Columbus, Cheribon y el S.S. Douglas
Estos y también otros interesantes datos sobre embarcaciones hundidas en Los Cóbanos han sido recopilados en el libro “Patrimonio Cultural Marítimo de El Salvador: Registro de Pecios”, del arqueólogo Roberto Gallardo.
La publicación presenta un compilado de las investigaciones del programa permanente del Museo Nacional de Antropología Dr. David J. Guzmán (MUNA), Registro y Documentación de Sitios Arqueológicos Marítimos en El Salvador. Dicho trabajo, que comenzó en 2011, fue dirigido por el mismo Gallardo.
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Avistamiento de Ballenas
Para los amantes de la vida marina, Los Cóbanos también ofrece la posibilidad de disfrutar de un espectáculo con la temporada de avistamiento de ballenas. En el país, entre los meses de noviembre y marzo, las posibilidades de observar a los cetáceos es alta.
Ese es el periodo en el que las ballenas se aparean y tienen a sus crías, por lo que buscan zonas de aguas cálidas para que estas crezcan. Para llegar acá, las ballenas recorren increíbles distancias desde lugares como Alaska, Canadá o Australia.
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Este fenómeno de la vida marítima ha sido aprovechado por los pobladores de Los Cóbanos. Los tours frente a las costas sonsonatecas se han consolidado como parte de la oferta turística en los últimos años.
El Salvador cuenta con una geografía costera que invita a disfrutar de su arena y sus aguas del Océano Pacífico. De oriente a occidente, el “Pulgarcito de América” ofrece más de 45 playas para todos los gustos.
Turistas extranjeros, nacionales y los salvadoreños que residen afuera de El Salvador no desaprovechan la oportunidad para gozar de sus cálidas aguas. Finalmente, y de acuerdo al Ministerio de Turismo (MITUR), El Salvador cuenta con más de 300 kilómetros de bellas costas.