Los salvadoreños son reconocidos por ser trabajadores y emprendedores. Estas son características que incluso pueden pasar de generación en generación. La familia Girón Zelada es un claro ejemplo de cómo el gen emprendedor se lleva en la sangre.
Estos salvadoreños tienen una historia de negocios familiares con más de tres décadas. Una librería y una panadería fueron los primeros emprendimientos de los Girón Zelada. La panadería cerró. Sin embargo, el aroma del pan recién horneado hizo eco en la familia.
Años después, el recuerdo al olor del pan llevó a Patricia Girón a emprender con una panadería artesanal. Por su parte, su padre, Antonio Girón, decidió abrirse camino en el rubro de los empaques ecoamigables para emprendedores.
Así nacieron Gize Bakery y Gize Bags, dos opciones guanacas que ofrecen pan gourmet y empaques al gusto del cliente.
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Salvadoreños con gen emprendedor
El matrimonio Girón Zelada tiene alrededor de 34 años de tener un negocio familiar. Se trata de dos pequeñas librerías. Una se ubica en Santa Tecla, en la residencial San Rafael, y la otra está por el estadio Cuscatlán.
“Tenemos más de 30 años de estar con la librería, y en ese desarrollo se nos cruzó la panadería, comenzamos con ambas cosas”, explicó Antonio Girón. En esa época, su hija Patricia era una adolescente. La falta de tiempo hizo que sus padres vendieran la panadería.
Tan bonito lo bonito #DonGizeBakery #GizeBags https://t.co/eUBabopIRX
— Patricia Girón (@PattyGize) January 17, 2018
Sin embargo, en la cabeza de Patricia siempre quedó el eco de crecer en un ambiente emprendedor y el recuerdo del peculiar aroma del pan.
Gize Bakery, productos naturales a la puerta de tu casa
El emprendimiento de Patricia Girón tiene cinco años. Inició a través de las redes sociales haciendo entregas a domicilio. El recuerdo del olor a panadería tradicional quedó grabado en su interior y la acompañó desde su adolescencia.
Ahora, Patricia es la dueña de la panadería gourmet/artesanal Gize Bakery. Como ella explica, el toque de su emprendimiento está en la preparación.
No usa preservantes, ni colorantes, tampoco premezclas, todo es natural, comentó. “Hacemos desde las masas y sus rellenos”, añadió.
Patricia explica que iniciaron con ventas de tartas y quesadillas, como producto nostálgico. Hemos ido diversificando a medida hemos avanzado e introduciendo nuevos sabores, señaló.
Además de continuar con las entregas a domicilio, Gize Bakery cuenta con un espacio fijo de venta. Se trata de “La Estación”, ubicada en la librería de su padre, la cual opera de lunes a viernes de 2 la tarde a 7 de la noche.
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Gize Bags, soluciones amigables con el medio ambiente
Antonio Girón continúa al frente del negocio familiar de las librerías. Precisamente en una de las salas de ventas fue donde tuvo la idea de su emprendimiento.
“En realidad fue así como chistoso. Veía las bolsas que tenía de venta y me dije que no debía vender bolsas chinas, sino que debía de fabricar todas las bolsas que yo vendía”, explicó a Guanacos.com.
La idea era crear productos ecoamigables, pensando en el medio ambiente y en el negocio, ver de qué forma se aminora el impacto ambiental. Sus bolsas son resistentes, no dan solo para un uso, se pueden reutilizar.
Ese fue el comienzo de Gize Bags, comentó Antonio. Desde entonces, han transcurrido seis años. Al igual que su hija, su trabajo es artesanal.
Si bien tiene sus medidas estándar para la creación de empaques, elabora los productos según la necesidad del cliente.
Reinventándose para crecer
Patricia explica que pese a lo complicado de la coyuntura, la pandemia les ha permitido potenciarse un poco. Considera que ahora más gente se animó a conocer el producto local.
“Normalmente creo que siempre vamos a los mismos lugares y no le damos la oportunidad a mucha gente que está haciendo y creando cosas, de conocer. Este tiempo ha sido genial para los emprendedores porque nos hemos dado a conocer más, la gente ha probado nuestros productos”, señaló.
Antonio, por su parte, recalca que estos meses han sido de reinventarse. Manifiesta que para ellos ha sido importante meterse al conocimiento tecnológico, a ventas por internet, por redes, “en ese tren que no estábamos acostumbrados”.
“De esta pandemia nos ha quedado este buen sabor de aplicar otros conocimientos al negocio y que sí funcionan”, dijo.
A lo largo de más de tres décadas, la familia Girón Zelada ha demostrado tener el gen del emprendimiento. Señalan que la perseverancia es clave en este tipo de negocio. Siempre hay que reinventarse, dijeron estos emprendedores salvadoreños.