Digna Dinora Segovia es una enfermera salvadoreña auxiliar de 62 años de edad que labora en el Hospital Nacional Dr. Jorge Mazzini Villacorta, en Sonsonate.
Esta sonsonateca cuenta con 35 años de experiencia en la profesión, de los cuales 23 años han sido en el nosocomio donde trabaja actualmente.
Digna comenta que su pasión por la enfermería empezó desde su infancia, pues el deseo de servir al prójimo siempre ha sido parte de su forma de ser.
Ahora, con la pandemia del COVID-19 que golpea a las naciones de todo el mundo, Digna es consciente de los riesgos y el rol que juega el personal de salud.
Mi rol es “estar siempre pendiente para trabajar por aquel que me necesita”, dice.
Esta enfermera salvadoreña se volvió viral en redes sociales tras el inicio de la cuarentena especial anunciada por el Gobierno. Ante la falta de buses, Digna decidió tomar su bicicleta para ir a su trabajo.
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Siempre lista a servir
Esta salvadoreña comenta que si bien no está directamente ligada a los pacientes de COVID-19, siempre está atenta a responder cuando la situación amerite su participación.
Su labor dentro del hospital está en el área de tomografía axial computarizada, comenta. En ese espacio, brinda atención a los pacientes que necesitan un examen más extenso.
“Con el problema de la pandemia todos estamos un poco preocupados, pero como enfermera tengo que estar ahí presente, porque ese es mi juramento hacia proteger vidas”, explica Digna.
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Entrega a la profesión
Ya son más de tres décadas las que Digna ha dedicado a cuidar de la salud de los salvadoreños. Su alegría y pasión por servir permanecen intactas.
Esta guanaca cuenta que su motivación es poder servir, ayudar a todo aquel que la necesita. Eso fue lo que la impulsó a ser enfermera.
“A mí me encanta mi profesión, gracias le doy a Dios que en cada lugar en el que he estado, he servido de una forma muy bonita a aquel que me necesita”, dice.
Para Digna, el mejor premio de su profesión es ver salir adelante a los pacientes.
“Y que se lo agradezcan a uno es lo mejor”, agrega.
Añade que una de las mejores experiencias que tuvo fue años atrás, cuando sus pacientes, sin decirle nada a ella, trataron de evitar su traslado a otro hospital.
Digna cuenta que ese es un proceso normal, pues son personal que puede rotar de ubicación.
“Fue para mí una experiencia muy linda, que fueran a la dirección a pedir que no me trasladaran, pese a que es un proceso normal. Eso le llena a uno el alma, y como a mí me encanta mi profesión, eso me llenó más”, comenta.
Enfermera salvadoreña superando obstáculos
Tras la suspensión del transporte colectivo, como parte de la cuarentena especial, muchos trabajadores salvadoreños se vieron afectados en su movilidad.
Fue precisamente esta situación la que volvió viral a Digna. Ella decidió que retomaría un viejo hábito para llegar al hospital Mazzini: pedalear.
Esta enfermera salvadoreña cuenta que había abandonado la bicicleta, pero que ante la situación, consideró que era la mejor forma de movilizarse.
“A mí me encanta la bicicleta, la había abandonado un poco. Surgió de la nada, recuerdo que la noche que supe que al día siguiente no habría transporte, le dije a mi hijo ‘hijo, ínfleme las llantas que mañana quizá me toca bici”, asegura.
Si bien esta acción creó un debate en redes sociales, sin duda en un reflejo de la entrega de Digna por su trabajo. Al igual que las demás personas que se encuentran en la primera línea de combate contra el COVID-19.
“Sabemos que debemos estar al pie del cañón, siempre lo hemos hecho”, sentenció.
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