Siempre listo. Ese es el lema de vida de Edwin Orellana, un tecleño de 37 años. Hoy lo aplica desde la primera línea de combate de la emergencia nacional por la pandemia del COVID-19. “Siempre Listo” es el lema del movimiento Scout, el cual parece hoy reflejar la disposición de servir y ayudar a los demás de miles de salvadoreños como Edwin.

Edwin, como muchos trabajadores de la salud, es uno de miles de héroes anónimos que están trabajando largas horas para detener el Coronavirus. Edwin trabaja como Inspector de Vectores y una de sus misiones durante la crisis es desinfectar los centros de contención donde más de 3 mil salvadoreños están en cuarentena obligatoria.
El espíritu de servicio que aprendió Edwin en su infancia caló hondo en la persona que es hoy en día. La Ley Scout, que está compuesta por 10 puntos, dicta que un miembro de esta agrupación debe servir a los demás, cuidar la vida y la naturaleza y enfrentar la vida con alegría pese a las dificultades.
Edwin, quien fue miembro de la patrulla Águilas en su colonia de infancia en Santa Tecla, está poniendo en práctica los “mandamientos” scouts. “Lo de los scouts me enseñó el lema de compartir, estar siempre listo. Aprendés mucho, madurás mucho. Ese grupo te enseña a compartir con las personas, es una experiencia que jamás olvidas”, comenta.
Edwin está destacado hoy día en la Unidad de Salud de Antiguo Cuscatlán, en donde es el encargado de monitorear todas las enfermedades transmitidas como vectores. Dentro de sus obligaciones, comenta, está la coordinación con las alcaldías y las ONG, llevar control de los casos de estas enfermedades, hacer visitas y búsquedas de cuadros febriles.
Una promesa de entrega al prójimo
“Prometo hacer cuanto de mí dependa para amar a Dios, servir a mi país, trabajar por la paz y vivir la Ley Scout”, reza la promesa Scout, la cual Edwin ha tratado de aplicar a sus 12 años laborando en el rubro de la salud. Ante la crisis, su espíritu de servicio se ha elevado a una nueva dimensión. Como muchos salvadoreños solidarios, Edwin está aportando su contribución durante la emergencia nacional por el coronavirus.

Turnos de 24 horas continuas son parte de la rutina de este guanaco, hoy más que nunca. En estos momentos debemos ayudar a las demás personas, dice. “Tenemos que aportar un poquito de nosotros, un granito de arena para lograr solventar este problema que tenemos encima, tenemos que ayudar a muchas personas”, dice.
El Salvador vive una situación complicada con la confirmación de 32 casos de coronavirus, de los cuales 20 son hombres y 12 son mujeres, según la cifra oficial al 30 de marzo actualizada en el sitio web oficial covid19.gob.sv.
Pero esto, lejos de desmotivar a este salvadoreño, le da el impulso para salir cada día y dar su aporte. “Si está en nosotros ayudar, siempre lo vamos a hacer”, recalca Edwin. Su experiencia combatiendo el dengue y el paludismo han resultado valiosas en estos momentos.
Motivación por servir
Antes de obtener su cargo como inspector en vectores en la región central de salud del Ministerio de Salud, Edwin formó parte de un programa de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), en donde aprendió y realizó trabajos de rociado intra y peridomiciliar en las viviendas por diferentes tipos de enfermedades, como el mal de chagas, el paludismo, dengue y leishmaniasis.
Su fuerte, recalca, es “velar por la salud de las personas y llevar la salud a aquellos lugares remotos como los cantones, las zonas más alejadas”. “Tuve bastantes experiencias en enfermedades como dengue. Nosotros entramos a esos lugares abasteciendo botiquines, haciendo acciones antivectoriales. Aún las hacemos, más hoy con el coronavirus”, explica.
Ahora, mientras el país se encuentra en Estado de Excepción para dar respuesta a la pandemia del COVID-19, este guanaco realiza junto a su equipo labores de desinfección de los centros de contención, previo a la llegada de salvadoreños que deberán guardar la cuarentena preventiva.

“Es un proceso, cuando habilitan los centros de contención vamos y garantizamos que donde las personas van a estar albergadas todo esté en orden. Realizamos la desinfección, fumigación, acciones antivectoriales, para cuando estas personas se vayan a instalar ya tengan todo listo. Luego los ubicamos en sus habitaciones, preparamos los alimentos que se les entregan”, explica.
Edwin señala que se ha motivado aún más por su trabajo en este periodo de emergencia, hablando con las personas, oyendo sus experiencias.
“Cualquiera de nosotros puede estar en ese lugar y tenemos que ayudar. Todos somos humanos y necesitamos mucha ayuda, y por ende nosotros no lo pensamos, nos arriesgamos, vamos a estar ahí ayudando a estas personas”, afirma.
También te puede interesar: Henry Mejía un cantante que motiva
#QuédateEnCasa
Tras el anuncio del alza de casos confirmados por coronavirus en El Salvador, los llamados a los salvadoreños a cumplir la cuarentena decretada por el Gobierno y las medidas de prevención han aumentado.
Edwin, al igual que las autoridades de Salud, urge a los guanacos a quedarse en casa y no salir de no ser estrictamente necesario. “ Atendamos las indicaciones que nos están dando, no salgamos, no nos expongamos, porque lo que se trata es la manera de controlar esta situación”, dijo.
Algunas de las medidas personales recomendadas para controlar el virus son: lavarse las manos constantemente con agua y jabón o utilizar alcohol gel; no saludar de beso, abrazo, mano u otro tipo de contacto; no tocarse los ojos, nariz o boca; usar mascarilla al presentar síntomas gripales; y limpiar y desinfectar superficies que utilices regularmente.
¿Y tú, conoces otros guanacos comprometidos con el país y que estén echándole ganas para sacar adelante a El Salvador o ayudando a otros salvadoreños? Cuéntanos. Escríbemos