Diana Diaz, es una pintora salvadoreña donde su pasión por la pintura inició desde que estaba en kínder. Diaz se ha desarrollado como pintora y catedrática de las carreras de Arquitectura, diseño ambiental y diseño gráfico.
El arte desempeña un papel importante e influye en las vidas de las personas, ya que los artistas a través de su creación, pueden transmitir emociones, mensajes, reflexiones, problemas sociales y otros temas.
Todo niño es un artista
Cuando preguntamos a Diana sobre como inició su amor por la pintura, ella nos contestó: “Pinto desde mi niñez, tengo una anécdota: Estaba en parvularia, cuando se me ocurrió pintar un gran mural en la pared del patio de juegos de mi kínder, lo hice con yesos de colores y crayolas que tome ” prestados” de mi salón de clases, le dije a mi hermana y a una prima a que me ayudaran, las cuales más tarde me delataron y por supuesto me castigaron y me obligaron a limpiar toda la pared, me perdí varios recreos lavando, pero yo estaba satisfecha y orgullosa de mi obra de arte”.
Desde esa anécdota, Diana no pudo dejar de dibujar y pintar. En sus años de colegio sus compañeras de clase le pedían que hiciera las caricaturas que estaban de moda, como: Heidi, Candy, Mazinger Z, etc.

Educar a una sociedad
Diana Diaz, emprendió su propia academia de pintura, llamada “Trazo Natural”. Este emprendimiento nace de una inquietud que se formó en Diana, mientras trabajaba como docente de universitarios.
“Había un espacio que no se llenaba emocionalmente hablando, pues todos mis alumnos muchos con dificultades para realizar dibujos básicos y con temores e inseguridades a la hora de presentar un trabajo, creían que eran incapaces de realizar algo extraordinario porque se sentían inferiores, en cuanto a destreza al compararse con otros que ya dominaban el dibujo; y el reto era que solo tenía 5 meses para lograr que ellos aprendieran a desarrollar esas habilidades”.
La pintura, el dibujo, puede brindar paz, felicidad, esperanza, apreciar la belleza de todo lo que nos rodea, sacarle provecho a las situaciones que nos enfrentamos. Es por esa razón que Diana decidió abrir su propia escuela de pintura. “Vino a mí la necesidad de enseñar desde la edad temprana, quería guiarlos desde el principio en base a la naturaleza de sus trazos, así tal cual su personalidad, sin cambiarlos, solo ayudándolos a ser ellos mismos y a expresarse con confianza, sin temores, con su trazo natural; para cuando lleguen a una edad adulta sepan que pueden lograr cualquier objetivo que se hayan trazado.

La pintura es un lenguaje
La pintura es un lenguaje, donde se aprecia y usan colores, trazos, líneas, figuras, manchas en lugar de palabras.
La educación, el amor y pasión por el dibujo, la pintura y el arte, hoy en día, sigue siendo de gran importancia para la sociedad, todo requiere de compromiso, de expresarse sin decir ni una sola palabra.
Existen diferentes maneras de poder hacer representaciones artísticas donde las personas reflejen sus necesidades y lo que quieran expresar.
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