Alfa Karina Arrué se convirtió el 12 de mayo del 2022 en la primera persona salvadoreña en conquistar la cima del Monte Everest, en Nepal, la montaña más alta del mundo.
Alfa Karina es una salvadoreña apasionada y amante de los deportes. Desde pequeña practicó todo tipo de disciplinas. El fútbol, el baloncesto, béisbol, surf y escalada son solo algunos de ellos.
Pero esta salvadoreña encontró su pasión en 2013. Una etapa complicada de su vida la llevó a buscar nuevos retos. Así llegó al montañismo. En el 2021 se quedó corta de la cima del Everest. En el 2022 volvió a intentar.
“A mí siempre me ha gustado ponerme metas, retos en la vida, en todos los ámbitos y aspectos”, contó.

Una salida a Guatemala cambió su vida. En ese viaje escaló tres montañas y descubrió su amor por el montañismo.
Ya probó sus capacidades. Ha recorrido las cumbres de América. Busca demostrar que los salvadoreños pueden llegar a la cima del mundo. En el 2022 finalmente llegó a la cima del Everest.
Hija Meritísima de El Salvador
El pasado martes 27 de agosto, la Asamblea Legislativa de El Salvador declaró a Alfa Karina Arrué como “Hija Meritísima de El Salvador”, tras la aprobación, en días anteriores, del dictamen.
“Cuando comencé con este proyecto me di cuenta que no solo era una meta personal, si no una meta de país. Quería mostrarle al mundo la capacidad de los salvadoreños para lograr cualquier meta que nos propongamos”, declaró Arrué.

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Sus inicios en el montañismo
“Fijate que personalmente estaba pasando un momento bien triste en mi vida. Estaba pasando por un proceso de divorcio. Eso me generó mucha depresión. Estaba mal. En ese proceso estuve como seis meses sin hacer nada”, dijo Alfa Karina Arrué.
“Luego volví, empecé a nadar, salir a correr, pero sentí que necesitaba más. Entonces estaba buscando una actividad que me generara retos, algo diferente. Así fue como empecé a buscar actividades los fines de semana y di con el montañismo”, contó a Guanacos.com.
A la conquista de las alturas
Alfa Karina ha conquistado las cumbres de más de 10 países de América.
“He hecho toda Centroamérica. En Guatemala hice todos los volcanes oficiales, por lo que me dieron un premio que se llama Hijo del Quetzal. También hice el reto de todas las cumbres más altas de Centroamérica”, comenta orgullosa.
“También he escalado la montaña más alta de todo el continente, que es el Aconcagua en Argentina. De El Salvador solo dos mujeres hemos hecho esa cumbre. Una compañera que fue en los años 90 y yo en 2017”, añade la montañista salvadoreña.

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Alfa Karina Arrué: La primera salvadoreña en el Everest
En el 2015 Alfa Karina decidió llevar su amor por el montañismo a un nuevo nivel. Ella se considera una mujer que gusta de investigar sobre los temas que la apasionan. Así empezó a buscar literatura de montaña.
“Cuando me apasioné de la montaña empecé a buscar bastante literatura. Hay mucha literatura de montaña, de personas que han hecho grandes retos. Empecé a leer sobre todo eso y a entrenarme en alta montaña”, explicó.
“Investigué cuántos salvadoreños habían hecho expediciones y retos. Me di cuenta que ningún salvadoreño, hasta la fecha, ha siquiera intentado hacer la cumbre del Everest o alguna cumbre del Himalaya”, agregó.
Entonces se me ocurrió decir “bueno, yo quiero ser la primera en hacerlo”. Y lo logró en mayo del 2022.






Mensaje positivo a los salvadoreños
Karina reconoce que todo empezó como un reto personal. Pero luego comenzó a plantearse que a través de su sueño podría transmitir un mensaje.
“Empecé a plantearme que quisiera llevar un mensaje positivo y de esperanza a las nuevas generaciones de salvadoreños”, dijo.
En estos cinco años de preparación ha tenido momentos de flaqueza. Reconoce que hubo personas que incluso le dijeron que ningún salvadoreño sería capaz de subir al Everest. Pero eso no la hizo perder su objetivo.
“Ahora lo he tomado como un reto para demostrar que los salvadoreños tenemos el derecho de soñar en grande. Porque me han transmitido eso, como que por ser salvadoreño no tienes el derecho o la capacidad para soñar en grande y lograr grandes cosas”, explicó.
La pandemia de covid-19 retrasó sus planes. Su idea era alcanzar la cima del Everest en el 2020 y después en el 2021, cuando se quedó corta debido a una tormenta.
Hay que “romper ese miedo que lo paraliza a uno a pensar que no se puede y tener valor y coraje de intentarlo. Hasta que no lo intentamos no nos damos cuenta de lo que somos capaces”, sentenció.