La arqueología subacuática es una disciplina relativamente reciente en el mundo y en El Salvador. Su desarrollo ha permitido enriquecer la identificación del patrimonio cultural salvadoreño.
Esta disciplina estudia las sociedades e individuos del pasado que tuvieron una relación con el mar. Esto a través del análisis de los restos materiales. ¿Qué se estudia? Muelles antiguos, complejos portuarios, naves hundidas (pecios) y hasta ciudades bajo el mar, entre otros.
Roberto Gallardo, reconocido investigador salvadoreño de esta rama, explica que esta disciplina cuenta con más de una década de desarrollo en el país.
Arqueología Subacuática en El Salvador: El inicio
Los inicios de la arqueología subacuática en El Salvador se remontan al año 2005. El punto de partida fue un convenio entre Argentina y El Salvador.
Investigadores del Consejo Nacional para la Cultura y el Arte (CONCULTURA) y especialistas argentinos de las universidades de Buenos Aires y de Rosario desarrollaron en 2005 un proyecto exploratorio en El Salvador
Los primeros análisis se centraron en los lagos y las costas marítimas cercanas a los puertos. Entre los resultados se identificó una considerable cantidad de sitios.
Los Primeros Frutos
Esta rama científica dio rápidamente sus primeras frutos y nuevas preguntas. La necesidad de desarrollarla era evidente.
En 2005 se dieron los primeros pasos. Se realizó la primera campaña de identificación de sitios. Cuatro de ellos se agregaron al Mapa Arqueológico Nacional. Y se realizó el Primer Seminario sobre patrimonio cultural marítimo.
Pese a que la costa salvadoreña es corta (320 km), las primeras investigaciones demostraron que resguarda importante patrimonio. Roberto Gallardo comenta que El Salvador cuenta con una riqueza cultural marítima muy importante que debe ser investigada y protegida.
Patrimonio Marítimo Salvadoreño
El Proyecto de Registro y Documentación de Sitios Arqueológicos Marítimos en El Salvador inició en 2011. El primer barco hundido registrado fue el “SS San Blas”, localizado en la Playa San Blas, departamento de La Libertad. Esta famosa playa salvadoreña lleva su nombre dado el pecio que le acompaña.
El “SS San Blas” se ubica en el extremo este de la playa. Sus restos yacen diseminados en un área de aproximadamente 200 metros este-oeste, empezando en la punta rocosa y continuando hacia el oeste en la playa arenosa. Durante mareas muy bajas se pueden observar dos fragmentos que salen a la superficie a poca distancia de las rocas. El fragmento de mayor tamaño, el motor del vapor fue ubicado con GPS; a una profundidad de entre 10 y 20 pies.
El Salvador cuenta con 12 lugares identificados dentro de su patrimonio cultural marítimo. En la publicación de Roberto Gallardo: “Patrimonio Cultural Marítimo de El Salvador. Registro de Pecios”, estos sitios son descritos. El lanzamiento de esta publicación científica fue en febrero de 2018.
En los últimos años, este registro de lugares se ha divulgado. Entre su finalidad está que los salvadoreños valoren su patrimonio mediante el conocimiento. El gran objetivo es que estos sitios sean protegidos mediante un compromiso comunitario.