La Biblioteca Nacional de El Salvador (BINAES) es una de las centenarias construcciones erigidas en el país. Con más de 150 años, diferentes sedes y con el trabajo de difundir la producción bibliográfica nacional, la biblioteca se convirtió en un espacio importante para la cultura.
En sus más cien años, cientos de salvadoreños y extranjeros visitaron sus instalaciones. Además, en su interior, también se realizaron actividades en pro de la literatura salvadoreña, como festivales de poesía o lectura de producciones nacionales.
Historia de la Biblioteca Nacional de El Salvador
La Biblioteca Nacional de El Salvador se fundó, originalmente, con el fondo conseguido gracias a la colección de obras que pertenecieron al cardenal Luigi Lambruschini, quien fue secretario de Gregorio XVI, según indica el historiador salvadoreño Carlos Cañas Dinarte.
Esta se fundó el 5 de julio de 1870, a través de un decreto que fue presentado por el Ministerio de Relaciones Exteriores e Instrucción Pública, como detalla la Dirección Nacional de Archivos y Bibliotecas, sin embargo, su inauguración oficial se dio hasta el 15 de marzo de 1888, según el Diario Oficial N.° 65, Tomo N.° 24, con fecha del 16 de marzo de 1888.
La colección de Lambruschini, con más de 6,000 libros en diferentes idiomas como español, francés, italiano o latín se conserva actualmente por la biblioteca.
Originalmente, la biblioteca estaba destinada a ubicarse dentro del antiguo Palacio Nacional de San Salvador, sin embargo y como reza la historia de este palacio, fue consumido por un incendio en 1889.
Sedes de la BINAES
Su primera ubicación oficial fue en uno de los edificios de la Universidad de El Salvador ubicado en la avenida España, en el Centro Histórico de San Salvador. Posteriormente y debido a un terremoto en 1873, debido reubicarse al actual Palacio Nacional, retornando en 1879 a la UES, según indica Blanca Abarca de La Prensa Gráfica.
En 1964, la biblioteca funcionó en un edificio en la calle Delgado, sin embargo, este recibió graves daños por un terremoto en 1986. Posterior a este suceso, se ubicó en el antiguo edifico utilizado por el Banco Hipotecario, en el Centro de San Salvador, hasta su demolición en a finales de 2021 e inicios de 2022 para su reconstrucción.
Nombres de la Biblioteca Nacional de El Salvador
Al momento de su nacimiento, la biblioteca fue denominada Biblioteca Nacional Salvadoreña, como detalla el decreto ejecutivo referente a su fundación. No fue hasta 2002 donde se denominó oficialmente como “Francisco Gavidia“, en honor a uno de los escritores salvadoreños destacados.
El poeta, dramaturgo, cuentista, historiador, ensayista, periodista, traductor, maestro y escritor fue director de la institución entre 1906 y 1919.
Curiosidades de la Biblioteca Nacional de El Salvador
Blanca Abarca de La Prensa Gráfica detalla diferentes curiosidades y recuerdos de la biblioteca. Entre ellos están:
- En sus instalaciones se ubicaron las primeras gradas eléctricas que operaron en El Salvador.
- Contaba con una sala de lectura braille, con diferentes obras clásicas en su interior.
- También existía una hemeroteca que funcionaba en el sótano de la biblioteca. Según detalla Abarca, se encontraban ejemplares de los principales periódicos del país que han circulado desde el siglo XIX.
- En su interior se encontraba una sala de lectura infantil, con títulos en inglés y español.
- La biblioteca contaba con un “Bibliobús” que recorría diferentes puntos del país para llevar libros a los salvadoreños.